Una buena máquina de café para bares es imprescindible para que las habilidades del barista queden patentes y estén a la altura de nuestras expectativas.
Sabiendo que el café es la bebida más consumida en los bares, restaurantes y cafeterías de nuestro país, no podemos desaprovechar la oportunidad de preparar el mejor café para atraer el mayor número de clientes a nuestro negocio. ¿Conoces los modelos de máquina de café para bares de Gesvending?
Máquina de café para bares: calidad, resistencia y facilidad de uso
Las habilidades de un buen barista siguen están muy valoradas dentro del sector de la hostelería, pero va a necesitar siempre de las prestaciones de una auténtica máquina profesional para conseguir resultados a la altura de nuestras expectativas. Los diferentes modelos de máquina de café para bares de Gesvending ofrecen calidad, resistencia y facilidad de uso.
Las cafeteras profesionales están diseñadas para llevar a cabo un uso intenso y continuado de cientos de servicios de café diarios. Además de preparar distintos tipos de café: capuccino, café con leche, cortados, americanos, solo… y tienen que ser rápidas y funcionar sin problemas. Es ahí donde reside la principal diferencia con las cafeteras para casa. Estas, aunque sean de alta gama y realicen un expreso de calidad, están pensadas para el uso doméstico por lo que, generalmente, no realizan varios tipos de cafés y el tipo de bombas que utiliza no soportan una alta producción. De ahí la importancia de que la máquina de café para bares sea eficaz y resistente. Como las de Gesvending.
Modelos de máquinas de café profesional para bares
Te invitamos a conocer lo modelos de cafeteras profesionales para bares de Gesvending y te recomendamos muy encarecidamente la gama Aroma SE. Se trata de máquinas de café profesionales que ofrecen una extensa variedad de soluciones: desde 2 grupos (modelo AROMA SE 200) hasta 4 grupos (modelo AROMA SE 400).
La gama Aroma ha sido creada con la más alta calidad y tecnología de Saeco, para satisfacer todas las necesidades de los profesionales de hostelería. Disponen de preinfusión programable, regulación electrónica del café en la taza, lanza de agua caliente y lanza de vapor.
Para entender la importancia de disponer de una máquina café para bares profesional hay que entender cómo es su funcionamiento y cuál es su principal diferencia respecto a las cafeteras domésticas.
De manera muy resumida, podemos decir que en este tipo de cafeteras el agua se calienta para que alcance mucha presión. Y luego se le hace pasar por el filtro donde está el café molido. El agua, muy caliente y con mucha fuerza, extrae de manera inmediata todos los matices del café y los concentra en una bebida que todos conocemos como café espresso.
Como norma general podemos decir que cuanto mayor es la presión- mayor el número de bares- mayor es la cremosidad e intensidad del café. El café espresso normalmente es corto, intenso y cremoso en la superficie. Pero hay que tener cuidado, si la presión es demasiada, puede resultar algo agresivo en el paladar. Según los expertos, 9 bares de presión son los idóneos y suficientes para la elaboración de un café espresso.
La mayoría de cafeteras express domésticas tienen alrededor de 15 bares de presión en lugar de 9. La explicación reside en que el tipo de bombas que utilizan las cafeteras domésticas para generar la presión funcionan de forma diferentes de las bombas que emplean las cafeteras profesionales.
Las cafeteras domésticas incorporan válvulas de sobrepresión a sus bombas de tipo vibratorio para conseguir que la presión final sean los 9 que se necesitan, ya que, debido a su funcionamiento, estas bombas disipan varios bares de presión durante el proceso.
La máquina de café para bares emplea bombas rotativas en las que el caudal de agua es constante e independiente de su presión. Esto les permite emplear más o menos cantidad de líquido, sin que la presión se vea alterada. De hecho son capaces de generar mucha más presión, pero se controlan de manera automática para que no sobrepasen esa cifra estándar de 9 bares, que es lo que mandan los cánones del espresso.
El proceso de extracción de las máquinas domésticas es pues mucho menos preciso que el que consiguen las profesionales, y por este motivo las cafeteras de hostelería son capaces de extraer un café con muchos más matices, y en general con mejor sabor.
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